Península de Valdés: espectáculo natural patagónico

Península de Valdés - 370km (Total 12.270km)


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Cuando el ómnibus donde pasé la noche llegó a Puerto Madryn apenas eran las seis de la mañana. Los albores del día me condujeron hasta la playa para disfrutar de este caprichoso espectáculo de luces invadiendo sombras que se repite casi cada venti-cuatro horas en prácticamente todos los lugares de este planeta, aunque claro está que cada sitio tiene su belleza especial. Al estar acercándome constantemente al sur, las tonalidades cromáticas varían respecto a todo lo que aprecié anteriormente en mi vida, ¡y es que nunca antes había estado en zona tan austral!

Tras conseguir un buen hostal y pasar el día conociendo el lugar, organicé mi excursión para, a la mañana siguiente, partir a visitar este imprescindible paraje de la Patagonia llamado Península de Valdés. Así, bien temprano en la mañana, partimos unos cuantos a recorrer los cien kilómetros que nos separaban hasta adentrarnos en ella.

De la península cabe decir que está caracterizada por fuertes vientos que azotan su hoy despoblado territorio. Convertida toda su enorme extensión en un parque natural protegido, uno se plantea lo dura que debió ser la vida para los "tehuelches", la población nativa de la zona, antes unas condiciones climáticas tan inhóspitas. Los vendavales que van y vienen a su impredecible antojo además imposibilitan que la vegetación crezca más de cincuenta centímetros del suelo, con lo que finalmente es la estepa la que ha terminado poblando la oreografía existente.



Los "tehuelches" ni siquiera tenían bosque para juntar madera con la que hacer fuego, y su principal fuente de economía doméstica era el guanaco, una especie hoy en protección y de aspecto muy similar a las llamas. De él comían su carne, se abrigaban con sus pieles, pero también con ellas realizaban las paredes de sus chozas, elaboraban cuerdas con los tendones de sus cuerpos...

Sin embargo, hoy en día, y ante la total desaparición de la cultura nativa y de, por supuesto, su hábitos y costumbres, la totalidad de la península se ha convertido en un reclamo turístico para aquellos que admiramos la naturaleza en general y su riqueza animal en particular.




Aunque no estamos en temporada, duranta la primavera austral ballenas gigantes vienen a la península a aparearse y parir tras pasar el invierno alimentándose más al sur. Es un espectáculo impresionante el poder navegar al costado de tan inmenso animal, pero la época del año lo imposibilitaba.

Sin embargo, si que existía la opcion de que, en otro lugar de la península, pudiésemos observar otro espectáculo de la naturaleza que alguna vez pude disfrutar y dejarme sorprender en documentales televisivos sobre la fauna marina. En este período del año, las orcas, mal llamadas "ballenas asesinas", se arriesgan voluntariamente a quedar varadas en la playa para intentar cazar a leones o lobos marinos que juguetean entre la arena y el agua.

Dos días antes de la visita, otro grupo de turistas habían avistado hasta diez ataques, así que las posibilidades se redujeron notoriamente al estar ya las orcas bien alimentadas tras lograr tantas presas hacía tan poco.

Desafortunadísimamente así sucedió. Ni siquiera avistamos las aletas de las orcas acercándose a la playa tras dos horas de espera. Eso sí, nada me impidió ver a los leones/lobos marinos:

A continuación debiera ir algún vídeo mío con la deseada grabación pero, ante su ausencia, aquí les dejo otro que he encontrado en la red y que refleja perfectamente el espectáculo natural de la a veces cruel naturaleza, y que en esta ocasión no pude apreciar con mis propios ojos:

Sin embargo, sí que pude seguir disfrutando de la vida salvaje animal de muchas especies más como los cormoranes o, justo a su lado, el pingúino emperador:

Y también de los zorros, guanacos, algún otro que no me acuerdo, y los más graciosos de todos: los armadillos:

Este bicho tan increíblemente raro me provocó muchísima gracia. A pesar de la enorme fealdad que puede aparentar a primera vista, se mueve de una forma graciosísima: va dando saltitos rápidos y rítmicos mientras muestra gran curiosidad por los humanos. Se te acerca hasta el punto de que te llega a tocar el pie...¡o la cámara!:

La verdad es que aprendí mucho y lo pasé muy bien. El colofón final fue antes de irnos, justo cuando vi aparcada la furgoneta de Arthur y corrí a saludarlo:

- "Ey, Arthur: we're in the same route, but there only passed three days since the last time...hahahaha".

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Y llegó el día venti-cuatro de marzo. En esta fecha se conmemora en todo el país el Día de la Memoria.

Hay países donde, ante hechos históricos dictatoriales, muchos prefieren olvidar y arrojar a un pozo sin memoria la ignonimia, la matanza, la tortura, el abuso de la fuerza militar, los excesos asesinos del poder, ocultar a los desaparecidos... Otros, como aquí en Argentina, prefieren recordar. Desde el año 2002 este país decidió instaurar esta fecha como día feriado. Nadie trabaja, solo se cumplen los servicios mínimos. Es día de recuerdo y luto. El venti-cuatro de marzo se conmemora el aniversario del Golpe de Estado ejecutado por el cruel, sanguinario y asesino General Videla y las sanguijuelas de sus secuaces.

Después de 30.000 desaparecidos y tras la lucha de los movimientos ciudadanos para que haya justicia, finalmente se logró mantener el recuerdo de este horror. En aquellos días, cualquiera que anduviese por la calle indocumentado o simplemente hablando con otra persona, cualquiera que pudiese ser sospechoso de ir en contra del nuevo régimen, cualquiera de ellos era susceptible de sumarse a las listas de desaparecidos...¡cualquiera! Su destino podría haber sido el de tantos otros, es decir, terminar sus días drogado con sedantes en un avión militar para ser arrojado vilmente al río y así engordar las filas de los miles que desaparecieron por ser infieles al nuevo sistema totalitarista. Los que tuvieron más suerte pudieron sobrevivir a costa de mantener el silencio tras sufrir terribles torturas.

Tras la barbarie y la violencia del Golpe de Estado, Argentina prefiere no olvidar. Esa ausencia de olvido, esa necesidad del recuerdo, de la Memoria, con mayúscula, existe porque está amarrada a la justicia y a la necesidad de que las nuevas generaciones sepan qué pasó, y que a su vez lo trasladen a las siguientes que están por venir para que nunca jamás vuelva a suceder. Fueron ciento setenta años de Historia fulminados en solo siete.

España, con su inmemorial pasado milenario, tiene tanto que aprender...

Asimismo, también quiero mencionar un último hecho que sucedió mientras se realizaba este acto por la Memoria en Puerto Madryn, y que se simultaneaba con otros tantos por todo lo ancho y largo de el país. Como en una macabra y cómica broma del destino, casualmente mientras se aguardaba un minuto de silencio en honor a las víctimas de la dictadura militar, pòr una calle adyacente se aproximó una bulliciosa manifestación que hizo estéril tal pretensión de sepulcral silencio. Aquella otra reivindicación estaba motivada por el reclamo de justicia ante la brutal muerte y abuso sufrido por una cría de diez añitos una semana atrás. A los centenares de manifestantes se unían en su parte trasera todos los taxis de la ciudad en solidaridad con la familia (el padre pertenece al gremio). Al unirse concentración y actos por la Memoria con la manifestación citada, todo el mundo se "fundió" en un aplauso común, brazos en alto, como queriendo todos decir que vuestra lucha es nuestra lucha.

En ete pueblo argentino falta tanta justicia como la que sus ciudadanos reclaman.

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Seguimos rumbo al sur, hasta Ushuaia, la ciudad más austral del mundo (con permiso de los chilenos y su Puerto William)...